Un día, un hombre que vivía de engañar paró en un camino a una buena mujer.
- ¿Quién eres? -le preguntó la mujer.
- He caído del cielo -contestó el tramposo.
- ¿De verdad? -el rostro de la mujer se iluminó. -Entonces, quizás conozcas a mi marido, que murió el año pasado. Es alto, moreno y lleva una medalla de plata con mi nombre grabado.
- Claro que lo conozco. No lo pasa muy bien. No ha encontrado trabajo y no tiene para comer ni vestir.
- Pobrecillo! -se conmovió la mujer. - Si te doy un traje, ¿se lo llevarás?
- No, al paraíso está prohibido llevar ropas. El dinero es distinto. Un monedero escondido en los bolsillos no lo descubre nadie.
- Eso es! Toma éste: son todos mis ahorros.
La mujer entregó al desconocido una buena suma y le quedó muy agradecida por haberle hecho tan gran favor.
- Pero, ¿quién hubiera pensado que a mi marido le faltara en el paraíso hasta lo más imprescindible?
- ¿Quién eres? -le preguntó la mujer.
- He caído del cielo -contestó el tramposo.
- ¿De verdad? -el rostro de la mujer se iluminó. -Entonces, quizás conozcas a mi marido, que murió el año pasado. Es alto, moreno y lleva una medalla de plata con mi nombre grabado.
- Claro que lo conozco. No lo pasa muy bien. No ha encontrado trabajo y no tiene para comer ni vestir.
- Pobrecillo! -se conmovió la mujer. - Si te doy un traje, ¿se lo llevarás?
- No, al paraíso está prohibido llevar ropas. El dinero es distinto. Un monedero escondido en los bolsillos no lo descubre nadie.
- Eso es! Toma éste: son todos mis ahorros.
La mujer entregó al desconocido una buena suma y le quedó muy agradecida por haberle hecho tan gran favor.
- Pero, ¿quién hubiera pensado que a mi marido le faltara en el paraíso hasta lo más imprescindible?
5 comments en "El hombre que llegó del cielo"
Cuento de mi infancia, me encanto encontrarlo solo que esta incompleto
metirosa
esta todo completo
Al menos hubieras sino mas cortes
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